Plantas urbanas-rurales
Al redibujar y reinterpretar el casco histórico de Purmamarca se hizo una selección y ajuste de la información existente. Para ello traspasamos los datos recabados y seleccionados a la misma escala gráfica, a fin de poder superponerlos y realizar una lectura con escalas, técnicas gráficas y leyendas homogéneas que permitan entender las transformaciones territoriales (Vecslir et al. 2013 – Figura 7). Con esta información se pudo identificar las viviendas que se convirtieron en infraestructura turística y donde se han realizados nuevas construcciones. Asimismo, se distinguieron los cambios de zonas donde se agruparon los comercios con fines turísticos, distintos a lo que se proponía en las normativas locales y diferente a la organización existente décadas atrás, momento en que los comercios de ramos generales se emplazaban alrededor de la plaza y en las zonas bajas, cerca del río (Figura 8). Además, se conoció como se densificó Purmamarca (Figura 9), entre otros datos que surgieron de este análisis gráfico.
Junto al avance de la investigación, con el afán de entender la estructura urbana del pueblo nos hemos visto obligados a extender la mirada más allá de los límites tradicionales de la localidad, reconocidos -inclusive en 2014- por el gobierno local, los académicos que estudiaron el área y los medios de divulgación para los turistas. Con esto se confirmó lo ante dicho, que el campo no fue solamente un espacio en donde se obtuvo información, sino que allí, en interacción con la realidad analizada se construyó parte de la investigación. A partir del reconocimiento y analisis de la expansión de este pueblo sobre suelo que solía ser identificado como rural (Figura 10 y 11), se conocieron los nuevos asentamientos en los alrededores del centro, separados del casco urbano histórico por la accidentada geografía, pero estrechamente conectados al conglomerado histórico mediante las redes viales y las lógicas de la vida cotidiana (Figura 12 y 13).