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Conflictos, desafíos y oportunidades en los procesos de reurbanización en ciudad de Buenos Aires. El caso Villa 20, Lugano

La Villa 20
Las leyes de Urbanización de la Villa 20. Toma de terrenos y promesas incumplidas.

La Villa 20 es uno de los barrios históricos de la ciudad con más de 80 años de vida. En la actualidad está emplazado en el polígono delineado por las calles Av. Gral. F. Fernández de la Cruz, Av. Escalada, la calle Larrazábal y las vías del Ferrocarril Gral. Belgrano y tiene 33 manzanas. De acuerdo a lo que indica el IVC, viven alrededor de 9.116 familias siendo un total de 27.900 personas y representando un crecimiento entre los años 2000/ 2016 de un 116%. (12)

Desde agosto de 2005, la Villa 20 tiene su propia ley de urbanización (ley 1770) que establecía afectar ciertos terrenos a la urbanización, realizar un censo y acordar los pasos a seguir para avanzar en el proceso. Dichos terrenos ya se habían incluido en el año 1991 en la ordenanza que creaba los Distritos U31 (N° 44.873), zonificación específica dada a todas las villas y asentamientos reconocidos de la ciudad. El marco para la sanción de esta se da a partir de la ley 148, que se sanciona en el año 1998 con el marco de la nueva constitución de la ciudad, la cual colocaba como atención prioritaria a la problemática social y habitacional en las villas y núcleos habitacionales transitorios de la CABA.

En el año 2014, mientras esta ley se encontraba incumplida y en el marco de constante reclamos por la situación habitacional, se produce la toma masiva en los terrenos linderos a la villa propiamente dicha, los cuales formaban parte del polígono en el marco de la ley 1770. El terreno se encontraba en estado de abandono y de hecho en una parte del predio, cedido a la policía federal, funcionaba un cementerio de autos. Las 700 familias que toman el terreno bautizan al barrio como Papa Francisco en alusión a la reciente asunción como papa del Cardenal Mario Bergoglio. La toma dura más de 20 días hasta que se produce el desalojo de todas las familias, desalojo forzoso que termina con la promesa del gobierno de construir un barrio y tomar en cuenta a las personas que habían sido censadas y eran vecinos de la Villa 20 y barrios linderos como Pirelli, Villa 15, y el Asentamiento Obrero.

El gobierno desde el primer momento criminaliza la acción y no reconoce que en la zona había una problemática habitacional acuciante (especialmente el hacinamiento), de hecho el jefe de gobierno declaró que el problema era la inmigración descontrolada provocando un problema diplomático con el gobierno de Bolivia. En este marco, no toma ninguna medida más que promover el desalojo. (13)

Tras el desalojo, que incluye enfrentamientos y un intento por volver a tomar el predio, la Jueza Liberatori ordena al jefe de Gobierno Mauricio Macri urbanizar la Villa 20 antes del 10 de diciembre de 2015. El reclamo de quienes tomaban era que ese predio se transformara en un barrio.
El gobierno de Macri termina con casi nulos avances sobre los terrenos pero con un proceso de organización potente de vecinos, organizaciones y técnicos de universidades que insistían en la necesidad de que ese proceso se llevara adelante. Los vecinos no sólo insisten sobre el respeto a la ley 1.170, sino que también proponen un proyecto de viviendas para el barrio, pedían que se realizara el proceso de remediación y los estudios necesarios para ver si las tierras eran aptas, entre otras cosas.

En ese marco asume Horacio Rodríguez Larreta, comenzando el 2016 con una renovada propuesta de promover el proceso de urbanización de la Villa 20, y presentando un primer proyecto de Ley de “urbanización” del barrio con la misma lógica de proyectos de urbanización del macrismo: se planteaba la apertura de calles (sin ningún tipo de consenso), el cambio de normativa urbana y cambio de zonificación.

El proyecto dejaba sin definición cuestiones fundamentales como obras concretas de infraestructura y servicios, lógicas de relocalización de viviendas, mejoramientos de las viviendas existentes, y otros. Este proyecto también abría el camino para una regularización dominial de lo existente sin modificar las condiciones de habitabilidad de ninguna vivienda. Esta proyecto motivo que el colectivo de del barrio organizado y fuertemente activo se dispusiera a trabajar en la modificación del borrador de la ley.

No solo esto, sino que en el momento que comienza las discusión del proyecto, dicho colectivo contaba incluso con una propuesta para la construcción de viviendas nuevas en el predio de “Papa Francisco” que fue elaborada con un conjunto de profesores y alumnos de la universidad, que luego fue utilizada de base para el proyecto final.

En el proceso de construcción de la nueva ley de urbanización, podemos distinguir actores muy importantes que forman parte de este proceso y que en mayor o menor medida han aportado a los avances hasta el día de hoy. Por un lado la “Mesa Activa por la urbanización”, mesa conformada por organizaciones sociales y políticas del barrio, técnicos de la universidad y asesores de algunos legisladores de la ciudad, así como también participaron las defensorías y ong´s. Dicha mesa fue la que, en los inicios de la discusión del proyecto de Ley, ha conformado una masa crítica que pudo generar que la Ley finalmente votada – Ley nº 5.705, sancionada el 24 de noviembre del 2016 (primera lectura 8/9/2916) – contenga múltiples garantías que no se contemplaban en el proyecto original presentado por el ejecutivo.

Por otra parte, en el marco de la ley, artículo 2º, quedó conformada la «Mesa de Gestión Participativa para la Reurbanización del Barrio Villa 20″ (MGP»). La misma abarca a los organismos de la ciudad involucrados, los vecinos y organizaciones, con el objetivos del desarrollo de las etapas de diagnóstico, elaboración, ejecución, control, monitoreo y evaluación del Proyecto Integral de Reurbanización (en adelante «PIRU»). Dicha mesa está coordinada por el IVC.

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