Suscribir al newsletter:

Ciudad Roca Negra. Construyendo ciudad junto al colectivo organizado.

LA CASA DE LOS CHINGOLITOS
El juego problematizando el consenso.
Por Martín Flugelman

La casa de los Chingolitos, un juego de plaza, es una parte del proyecto participativo Ciudad Roca Negra. El juego, como forma de proceder y objeto a construir abre el debate sobre las construcciones materiales participativas, sus alcances y pertinencias.

Plan general consensuado y contingencias.

A partir del pedido de algunos integrantes del movimiento que comentaban que los Chingolitos, los hijos de los estudiantes del Bachillerato nocturno para adultos, no tenían espacio donde jugar mientras esperan a sus padres cursar surgió la necesidad de incorporar una nueva unidad al proyecto: La casa de los Chingolitos.
Para desarrollar la unidad se involucró a un grupo de estudiantes de la Facultad de Arquitectura de la UBA que se inscribieron para hacer la pasantía en el proyecto de investigación “Proyecto Roca Negra”.

Este nuevo pedido que no había aparecido en la instancia productiva del proyecto general consensuado en las asambleas de Ciudad Roca Negra introdujo una instancia de re-evaluación de las pertinencias y unidades proyectuales. Junto con los estudiantes universitarios se desarrollaron los protocolos que articularían las distintas instancias del trabajo y que terminaron involucrando a varios grupos que hasta el momento no habían participado de las asambleas de proyecto, los Chingolitos y los adolescentes de programa envión (1)   (www.desarrollosocial.gba.gov.ar/subsec/politicas_sociales/programas/envion.php).

07_juego de plaza_la casa de los chingolitos

Talleres y eventos. Simulacros y traducciones materiales.

“Los proyectos que me interesan, en cambio, son constructivistas; se proponen la generación de “modos de vida social artificial”, lo que no significa que no se realicen a través de la interacción de personas reales: significa que sus puntos de partida son arreglos en apariencia improbables. Y que dan lugar al despliegue de comunidades experimentales, en tanto tienen como punto de partida acciones voluntarias, que vienen a reorganizar los datos de la situación en que acontecen de maneras imprevisibles, y también en cuanto a través de su despliegue se pretende averiguar cosas más generales respecto a las condiciones de la vida social en el presente.” (2)

El juego cumple una función elemental en la vida humana donde no se la puede concebir sin su componente lúdico. Implica un movimiento de vaivén que se repite continuamente, es decir, un constante ir y venir, un movimiento que no está vinculado a fin alguno. La representación y la posición del espectador se pone en crisis, desdoblando los límites y trasladando al espectador en partícipe del movimiento que impone el juego. No propone distancias entre el que juega y el que observa el juego, construye participantes.

Utilizando la figura del juego, que estaba presente en las metodologías empleadas para la producción del proyecto general, se realizaron una nueva serie de instancias lúdicas para producir material e incorporar a niños y adolescentes que suelen tener un rol pasivo en la construcción del ámbito urbano.
¿Cómo construir participantes a partir del juego? ¿Cómo involucrar a los Chingolitos en un proceso de diseño? ¿Cómo realizar un taller con adolescentes para que se apropien de un juego de plaza? Utilizamos la estrategia de preparar ambientes y construir espacios de trabajo que establezcan unas condiciones determinadas y unos puntos de partida en la búsqueda de emergentes.

Los comentarios están cerrados.